Separación de productos fermentados: ¿en qué consiste?

Como te hemos explicado anteriormente en nuestro blog, la separación centrífuga es un proceso muy importante para distintas industrias de producción en el mundo, ya que garantiza un estándar de calidad que termina dando como resultado un mejor producto.

Un ejemplo de esto, es la industria de productos fermentados; para ilustrar el tema, hablemos específicamente de los productos lácteos fermentados, una industria donde este proceso es muy común. Estos productos cuentan con una base de leche y dependiendo específicamente del tipo de producto (leche, crema, queso, etc.), suele agregarse crema y leche en polvo, se usan estabilizantes para proporcionar una mejor textura al producto y de igual manera, también se pueden agregar edulcorantes y saborizantes para perfeccionar el producto.

Así como pueden agregarse distintos extras para mejorar un producto, también existe la separación de productos para lograr exactamente lo mismo: un mejor producto. No olvides que regularmente, después del proceso de fermentación se generan desechos (levaduras muertas, restos de materia vegetal, proteínas desnaturalizadas, etc.) que no pueden ser parte del producto final por obvias razones. Por ejemplo, en el mundo vinícola suele utilizarse el centrifugado para lograr una ausencia de sólidos que provocan en el vino malos olores y sabores indeseables.

Por lo cual, la separación de productos fermentados básicamente consiste en separar el líquido de la parte sólida; para esto se utilizan máquinas centrífugas para lograr que las partes sólidas se expulsen a través de sistemas hidráulicos. Considerando la potencia de la fuerza centrífuga generada en el interior de este tipo de maquinaria, se logra separar completamente el resto de residuos indeseables en una línea de producción.

Hablando de manera muy general, la separación y su proceso, genera los siguientes beneficios en una línea de producción:

● Automatización.

● Reducción en tiempos de producción.

● Ausencia de oxidación y clarificación de productos.

● En algunos casos, eliminación de operaciones de decantación y trasvase.

● No se pierden características organolépticas de los líquidos.

● Reducción de mermas de color.

● Reducción de costos en limpieza.

Por todo esto, la separación de productos fermentados es fundamental y actualmente, se logra a través de la separación centrífuga, ya que este proceso garantiza calidad y sobre todo, que se aprovechen las materias primas al máximo en cualquier línea de producción ¿Tienes más dudas sobre el tema? No dudes en contactar a nuestro equipo de expertos, quienes están más que capacitados para asesorarte en cualquier momento.

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